Mirar con ojos renovados el tiempo de crisis se convierte en un desafío, sin embargo, es un momento oportuno para avanzar y seguir fortalecidos, y a pesar de las realidades críticas que se esté viviendo a nivel global, sentir que algo nuevo va brotando.
Desde una mirada holística, nos planteamos como vivir la espiritualidad en este momento importante de la historia. Y empezamos con algunas preguntas que nos hacen caer en la cuenta de cómo estamos viviendo esta experiencia: Cómo te sientes en este tiempo? ¿Cuáles son los mayores temores que te habitan? ¿Hay algo nuevo que te genera fortaleza?
La espiritualidad es parte de la vida
¿Qué es Espiritualidad? Viene (del latín spiritus, espíritu, significa dinamismo, fuerza, novedad). En un sentido amplio, significa la condición espiritual, se ve como una dimensión de la persona.
Desde el punto de vista de la espiritualidad bíblica, tiene que ver con la lectura, reflexión, estudio, integración y vivencia del texto bíblico. Es querer asumir en la vida espiritual, lo que vivió Jesús y los demás personajes de la biblia, movidos por la fuerza del Espíritu.
Kart Ranner, teólogo católico, define espiritualidad como la vida toda, atravesada por el espíritu, y ¿qué es la vida toda? Consiste en todo lo que somos, lo que hacemos, por lo que vivimos, es finalmente, todo el existir, guiado por el dinamismo del Espíritu.
Pierre Teilhard de Chardin, dijo: No somos seres humanos atravesando una experiencia espiritual, somos seres espirituales haciendo una experiencia humana. Es decir, que la esencia de lo que somos es espiritualidad.
¿Qué nos trae como fortaleza la espiritualidad para los momentos difíciles?
- Evolución, cariño, ser más compasivos, más afectivos, más centrados, más
humanas/os - Nos trae apertura, refuerzo de la fe espiritual, personal, global
- Nos trae profundidad, reflexión, maneras distintas de ser
- También nos permite hacer nuevos caminos de búsqueda y apoyo para sí mismo y
para otros - Además, nos ayuda a sentir que no estamos solos ni solas en este universo
Luego de la crisis viene la vida
Juan 12, 24: Les aseguro que, si el grano de trigo que cae en la tierra no muere, queda solo; pero si muere, da mucho fruto.
Si bien es cierto, que este es un momento difícil, tenemos la certeza de que esto también va a pasar y luego de la crisis vendrá la vida nueva y buena. Donde todo lo vivido habrá servido para aprender las lecciones que nos está enseñando.
Por eso, está la invitación a reinventarnos constantemente, y reinventarnos es como un volver a nacer, hacerse nuevamente con una experiencia distinta, con unos objetivos nuevos, con un deseo de vivir diferente.
¿En qué acciones y actitudes necesitamos reinventarnos otra vez?
Revisar las emociones, aquellas que te destruyen hay que reinventarlas
A nivel físico, revisar los hábitos que nos impiden implementar el cuidado y el amor a sí mismo, y reinventar eso
A nivel espiritual, ver qué nuevas formas hay que establecer para crecer más y más
Nos ayuda recordar las fases de la mariposa: huevo, oruga, crisálida y mariposa; ninguna de ella puede ser saltada antes de madurar la fase anterior, y después de pasar por todos esos momentos, vemos salir una linda mariposa; también así nosotros, al reinventarnos, atravesamos la crisis y vemos salir algo bueno y bonito.
Pautas para reinventarse
El psiquiatra Luis Rojas Marcos, nos brinda estas siguientes pautas:
- Evolucionar al ritmo de los tiempos. Es una invitación a moverse y aprovechar el tiempo para continuar haciendo los avances que se ameritan
- Encontrar herramientas para el cambio. Poder identificar los recursos que nos posibilita el momento y que nos ayudan a hacer el cambio
- Identificar las barreras que hay que derribar. Al movilizarse, identificar aquellas cosas que nos impiden avanzar
- Evolucionar en el tiempo. Dinamizar la vida, las acciones, actitudes, las cosas y sacar lo mejor de todo el proceso.
Todo esto nos permite hacer una buena experiencia y aprender a sacar lo mejor de la crisis, a vivir la reinvención con espiritualidad, a ser mejores personas cada vez.