Con toda la familia en cada por esta pandemia, es oportuno momento para fortalecer lazos familiares.
Es muy saludable despegarse un rato del televisor con el tema del CoronaVirus.
Hay tantas cosas maravillosas que hacer en familia.
Reírse, hacer cuentos, interactuar sin presunciones, cuenten esas anécdotas de la infancia, vean películas con temas positivos, comedias para votar el estrés y calmar la ansiedad colectiva que produce este encierro obligatorio.
Inventen nuevas recetas, jueguen dominó, cartas, ajedrez u otro entretenimiento grupal.
Muy lindo es sentarse unidos simplemente a redescubrirse, escucharse sin juzgarse, mirarse a los ojos y sonreír.
Descubrir que sigue siendo la familia el núcleo más importante de la sociedad.
Buen momento para perdonarse y perdonar ofensas simples e irrelevantes, somos muy imperfectos todos.
Excelente cuarentena para fortalecer esos lazos familiares lacerados por vivir cada quien en su mundo a causa del trabajo y las tecnologías.
Seguimos en cuarentena, hay tiempo de sobra porque sabrá Dios cuando nuevamente volveremos a comer juntos, dormirnos en casa sin preocuparse ¿por dónde andarán sus hijos?
Nos vuelven a unir los momentos de dolor y crisis, primero el huracán María, luego los terremotos y ahora está pandemia del CoronaVirus.
Saquemos siempre el lado positivo de cada situación adversa que nos visite.
Combatan la ansiedad con la risa y la oración, porque aún en la adversidad se pueden encontrar momentos únicos y valiosos.
Quedarnos en casa, es lo mandatario y excusa propicia para querernos aún más porque para eso nacimos, para amarnos sin buscar perfecciones.