Fuente: www.bbc.com
Venezuela vivió este sábado una jornada llena de tensiones, enfrentamientos y varias incertidumbres.
Los intentos de acercarse a sus fronteras desde el lado colombiano y brasileño para tratar de introducir ayuda humanitaria dieron paso este sábado a disturbios y enfrentamientos que dejaron varias víctimas.
Según reportes de la agrupación civil Foro Penal, al menos dos personas murieron, uno de ellos de ellos un menor de 14 años, y, al menos 60 personas resultaron con heridas de balas en los sucesos ocurridos en los puntos fronterizos de Venezuela con Brasil y Colombia como resultado de los cruces entre manifestantes y fuerzas leales al presidente Nicolás Maduro.
Alfredo Romero, director del Foro Penal, explicó que la mayor cantidad de heridos por arma de fuego se produjo en la localidad de Santa Elena de Uairén, en la frontera con el estado brasileño de Roraima. Allí hubo 35 heridos de bala, incluyendo 3 adolescentes y 5 mujeres. Algunas de las víctimas recibieron múltiples disparos.
En el estado Táchira, en la frontera con Colombia, la cifra de heridos por esta causa fue de 25.
Los enfrentamientos tuvieron lugar luego de que camiones con ayuda, escoltados por varias personas, salieron de Cúcuta, en Colombia, pero se encontraron con el bloqueo en la parte de Venezuela.
Los activistas de la oposición denunciaron la «represión» por parte de las fuerzas de seguridad, que evitaron la entrada del cargamento, tal y como había solicitado el presidente, Nicolás Maduro.
Las fuerzas de seguridad lanzaron lacrimógenas y perdigones para dispersar a la multitud y uno de los camiones de ayuda fue incendiado en uno de los puentes fronterizos entre Venezuela y Colombia.
Mientras, según reportes de Migración Colombia, unos 60 miembros de la Fuerza Armada venezolana y funcionarios de otros cuerpos de seguridad venezolanos se han entregado tras los llamados a que depongan las armas y se pasen de su lado del líder opositor Juan Guaidó, quien el pasado mes se declaró presidente encargado.
Pero finalmente, la ayuda no pasó y tanto Maduro como su rival, al autoproclamado presidente interino Juan Guaidó, se declararon vencedores de la jornada.
Guaidó, a quien Maduro acusa de promover un golpe en su contra, aseguró que tras los sucesos del sábado pediría a la comunidad internacional mantener «abiertas todas las opciones» para lograr la transición en Venezuela.
Según precisaron fuentes cercanas a las operaciones a BBC Mundo, tres embarcaciones de la Armada venezolana se acercaron al barco con ayuda puertorriqueña.
Desde el barco se pidió paso al comando general de la Armada venezolana, pero se le negó por falta de un «permiso sanitario», según informó previamente la cadena estadounidense Telemundo, que viaja a bordo.
El barco decidió finalmente retirarse hacia la isla caribeña de Bonaire, territorio de Países Bajos.
Tensiones con Colombia
Durante un acto de apoyo en Caracas, el presidente Nicolás Maduro anunció que su gobierno rompe relaciones diplomáticas con Colombia y dio 24 horas a los diplomáticos de ese nación para abandonar el país.
«La paciencia se agotó, no puedo seguir soportando que se preste el territorio de Colombia para una agresión contra Venezuela por eso he decidido romper todas las relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno fascista de Colombia», dijo durante un acto de apoyo en Caracas.
Agregó que «embajadores y cónsules deben salir en 24 horas de Venezuela».
Dadas las tensas relaciones políticas entre los dos países en los últimos años,Bogotá no ha designado embajador en Venezuela desde hace más de un año.
Colombia, por demás, no reconoce el gobierno de Maduro y ha ofrecido su respaldo a Juan Guaidó como «presidente encargado».
El canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, respondió que como su país no reconoce al gobierno «del usurpador» Nicolás Maduro no romperá relaciones con Venezuela porque sí acredita a Juan Guaidó como mandatario de ese país.
«No obstante, para resguardar la vida de los funcionarios colombianos (en Caracas), dispondrá su viaje a Colombia a la mayor brevedad«, afirmó el jefe de la diplomacia colombiana.
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, había anunciado a última hora del viernes el cierre temporal del ingreso fronterizo de los puentes Simón Bolívar, Unión y Santander, los tres principales puntos oficiales de acceso terrestre a Venezuela desde suelo colombiano.
Origen de las protestas
La crisis que vive en Venezuela se agudizó a raíz de que el opositor Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento), se proclamara «presidente encargado» el 23 de enero.
Desde entonces, más de 50 países reconocieron a Guaidó como presidente interino de Venezuela y a la vez, desconocen el gobierno chavista de Nicolás Maduro.
La tensión aumentó en los últimos días con el anuncio de la entrega de varios centenares de toneladas de ayuda humanitaria -provenientes en su mayoría de EE.UU.- para este sábado 23 de febrero en distintos puntos fronterizos.
Por esa razón, Maduro, que niega que en su país hay una «crisis humanitaria«, había ordenado esta semana el cierre de las fronteras con las islas de Aruba, Bonaire y Curazao y con Brasil anteriormente.
La estrategia de la oposición es forzar al Ejército a permitir la entrada de los insumos, lo que sería visto como una debilidad del gobierno de Maduro, al que sus rivales tildan de «dictador» y que asegura que todo esto es un intento de «golpe de Estado» de la oposición y de gobiernos como los de Colombia y Estados Unidos.
«No son desertores aquellos guardias y efectivos de las FFAA (Fuerzas Armadas) que decidan sumarse a nuestra lucha. Han decidido ponerse del lado del Pueblo y de la Constitución», escribió Guaidó en su cuenta de Twitter.
El ejército es uno de los principales apoyos que tiene el presidente socialista Maduro, al que la oposición considera un «usurpador» tras el triunfo en las elecciones de mayo del año pasado que no fueron reconocidas por buena parte de la comunidad internacional.
Por ello, Guaidó, presidente del Parlamento, único poder del Estado controlado por la oposición, se proclamó «presidente encargado» el 23 de enero.
«Exigimos que se permita su ingreso en forma pacífica a territorio venezolano para beneficio de quienes lo necesitan. Impedirlo es un atentado contra los derechos humanos que podría constituir un crimen de lesa humanidad», dijo el presidente de Colombia, Iván Duque, al pedir a las Fuerzas Armadas de Venezuela que permitan la entrada de la asistencia.
«La ayuda humanitaria en definitiva va camino a Venezuela de manera pacífica y de manera tranquila para salvar vidas», dijo Guaidó.
Disturbios
El corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Guillermo Olmo, registró el momento en que la Guardia Nacional Bolivariana bloqueó este sábado el paso para cruzar hacia Colombia en Ureña, en el estado Táchira.
«La frontera de Venezuela con Colombia amanece con los pasos cerrados y fuerte despliegue de la Guardia Nacional y tanquetas antimotines. Malestar entre la población local, que depende de poder cruzar al otro lado para sobrevivir», anotó.
También señaló que los uniformados comenzaron a repeler la presión de las personas que querían cruzar hacia Colombia.
«La Guardia Nacional venezolana lanza bombas lacrimógenas contra los concentrados que exigen la apertura de la frontera», indicó.
Las localidades de San Antonio y Ureña fueron escenario de disturbios entre fuerzas de seguridad de Venezuela y manifestantes.
El viernes se denunció que hubo cuatro muertos y varios heridos en la frontera con Brasil, por donde este sábado entró parte de la ayuda humanitaria, según la oposición, que al mismo tiempo denunció una fuerte «represión» en Santa Elena de Uairén, en el límite con Brasil.
«Han fracasado»
El presidente Nicolás Maduro celebró la jornada como un triunfo.
«Hoy pretendieron un show más», dijo en un acto ante miles de simpatizantes en Caracas.
«30 días después, el golpe de Estado ha fracasado, los hemos derrotado», dijo en referencia a la oposición.
Los simpatizantes de Maduro gritaron «preso, preso» en referencia a Guaidó.
«Por ahora y por muchos años estaré al frente del destino llevando las riendas de la patria», manifestó Maduro.
«Como les dije hace 30 días, pasarán los días, las semanas y Nicolás Maduro seguirá al frente de la patria y aquí estoy de pie».
«Proceso irreversible»
Por su parte, Guaidó, flanqueado en Cúcuta por el presidente de Colombia, Iván Duque, del de Chile, Sebastián Piñera, y del secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, se mostró optimista.
«Es un proceso irreversible, todo va a cambiar a partir de hoy en Venezuela», insistió Guaidó, que denunció la violencia de parte de las fuerzas de seguridad y dijo que parte de la ayuda consiguió entrar, una afirmación que no fue confirmada por ninguna fuente independiente.
«Están masacrando al pueblo de Venezuela», denunció.
«Quiero enviar un mensaje de optimismo: la libertad va a triunfar más temprano que tarde», agregó por su parte Piñera, presidente de Chile.